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martes, 6 de agosto de 2013

MUJER MEMORABLE DEL MES DE AGOSTO 2013

Egeria (Considerada la primera escritora hispánica conocida)
(S. IV-V)


Escritora y religiosa hispanorromana, nacida en la región de Galicia en la segunda mitad del siglo IV y fallecida en la centuria siguiente. Viajera sabia e instruida, poseedora de una acusada curiosidad intelectual que la impulsaba a relatar con todo detalle cuantas novedades observaba fuera de su tierra natal, dejó escrito el universalmente conocido como Itinerarium Egeriae (Itinerario [o Peregrinación] de Egeria), obra en la que daba noticia a sus hermanas de religión, a través de epístolas, de una larga peregrinación realizada a Tierra Santa entre los años 381 y 384. El hallazgo, hacia finales del siglo XIX, de esta obra contribuyó notablemente a perfeccionar el conocimiento de la circunstancias sociales, culturales y políticas del Próximo Oriente en el siglo IV, así como al establecimiento de las pautas predominantes en las costumbres religiosas de la época (muy especialmente, en las comunidades religiosas femeninas).
Se sospecha, con cierto fundamento, que la escritora debía de proceder de una familia rica y bien situada en la alta sociedad de su tiempo, pues, de lo contrario, sería muy difícil explicar la extensa y profunda formación cultural que había recibido Egeria, verdaderamente extraña en una mujer de su tiempo. Existe la hipótesis de que estuviera emparentada con el Emperador Teodosio I. Igualmente, se considera que la escritora pudo haber sido la abadesa o superiora de una de las primeras comunidades religiosas femeninas que, por aquel tiempo, comenzaban a surgir como una nueva manifestación de la espiritualidad en el Imperio. En cualquier caso, se puede afirmar, que la autora del Itinerario gozaba de un enorme prestigio social e intelectual no sólo en su región, sino en casi todo el mundo conocido, ya que durante su viaje fue hallando, grandes muestras de apoyo, estima y respeto, es destacable el apoyo de las autoridades civiles que extendían visados y salvoconductos a su paso, de formaciones de soldados que le brindaban protección cuando había de cruzar por zonas peligrosas y de los religiosos masculinos que la honraban y asistían en todas sus etapas.
Egeria dio inicio a su peregrinación a mediados del año 381, cuando partió desde Constantinopla con destino a Jerusalén. La narración describe con detalle el modo de viajar a través del cursus publicus romano, la red de vías utilizadas por las legiones en sus desplazamientos (una red de 80.000 km), empleando como hospedaje las mansio, o casas de postas, o en otras ocasiones acogiéndose a la hospitalidad de los monasterios implantados en oriente desde hace años, pero todavía casi desconocidos en occidente. El Itinerarium se divide en dos partes: la primera narra el viaje y comienza cuando Egeria está a punto de subir al monte Sinaí, tras haber visitado Jerusalén, Belén, Galilea y Hebrón. Desde ahí se dirige al monte Horeb, y regresa después a Jerusalén atravesando el país de Gesén. Viaja después al Monte Nebo y a Samaria, y cuando se cumplen tres años de su partida vuelve de nuevo a Jerusalén y decide regresar a Gallaecia. Durante su regreso visita Tarso, se detiene en Edesa, visita Siria y Mesopotamia, y de nuevo a Tarso. Desde ahí pone rumbo a Bitinia y Constantinopla. El diario del viaje termina en ese punto, aunque antes de concluir aún expresa su deseo de visitar Éfeso. La segunda parte del diario describe la liturgia tal y como se lleva cabo en Tierra Santa, en oficios de diario, domingo y durante las fiestas de Pascua y Semana Santa. Se ignora, en la actualidad, si Egeria logró regresar algún día a su tierra natal después de haber cumplido el intenso itinerario que se trazara de antemano.
Su testimonio posee, en nuestros días, un valor incalculable, tanto por la abundante información histórica y el placer literario que brinda, como por la eficacia y contundencia con que pone de manifiesto el papel desempeñado en la época por las denominadas, por parte de algunos autores cristianos contemporáneos, "mujeres viriles", es decir, mujeres procedentes de las clases elevadas que se negaban a plegarse a los papeles socialmente establecidos para ellas (el matrimonio y la privación total de vida pública) para desarrollar cualquier actividad destinada exclusivamente a los hombres. 

 
FUENTES:
www.wikipedia.org